Sin nivel ni jerarquía internacional. Juan Aurich de Chiclayo decepcionó a su público y de paso a todo el Perú, al 1-2 ante la Equidad de Colombia en el duelo de vuelta por la primera fase de la Copa Sudamericana.
Sin nivel ni jerarquía internacional. Juan Aurich de Chiclayo decepcionó a su público y de paso a todo el Perú, al 1-2 ante la Equidad de Colombia en el duelo de vuelta por la primera fase de la Copa Sudamericana.
Ya en el encuentro de ida los bogotanos habían doblegado al conjunto chiclayano por 2-.0 pudiéndole aplicar una goleada pero por temas de definición los colombianos no pudieron aquella vez sentenciar la serie. El de ayer fue un partido que con poco o nada, la visita ganó y clasificó a la siguiente ronda en donde jugará ante Libertad de Paraguay.
Incapacidad del Aurich a nivel internacional, y que refleja que los conjuntos peruanos no tienen capacidad para enfrentar a conjuntos sudamericanos.. Si bien es cierto la plantilla de los chiclayanos lucha por el título nacional es sólo en el torneo domiciliario donde puede obtener ventaja por capacidad del equipo, pero esto repito sólo se da a nivel local, pues las actuaciones por lo general de los equipos peruanos dejan mucho que desear en torneos continentales (de los 3 elencos peruanos que disputan el torneo, sólo queda en carrera la “U”, equipo que recién debutará la próxima semana ante el Deportivo Anzoátegui de Venezuela). En resumen, los chiclayanos tienen una excelente plantilla sólo para el medio local, lo que es preocupante, ya que una de las mejores equipos en la actualidad en Perú no es capaz de competir en el extranjero.
En el encuentro disputado en el Coloso del Paseo del Deporte, es decir el Estadio Elías Aguirre de Chiclayo, el Aurich siempre tuvo el balón y creo ocasiones que no supo concretar luego del gol de Mauricio Montes a los 15’ vía golpe de cabeza. La Equidad nunca pudo encontrar el balón más allá de una jugada en el primer tiempo y en que un delantero cayó dentro del área pero el referí venezolano Escalante se hizo el “ciego” y no cobró un claro penal.
El Aurich insistió hasta los 65’ de juego, pues luego se nubló ante la salida del hombre más peligroso, el carrilero Roberto Guizazola, quien por un choque con su compañero Balbuena se lesionó y abandonó el campo sintético del Elías Aguirre.
A partir de ese momento, el Aurich entró en un vaivén de errores y llegó el triunfo colombiano, no por bondades ni virtudes de la visita, más bien se dio porque el elenco que dirige Umaña le regaló los goles a la Equidad, y fue de los errores de Luis Guadalupe en concreto que el triunfo colombiano se hizo realidad con ese refrán que dice “Nadie sabe para quien trabaja”.
A los 75’ Guadalupe pudo echar un balón al lateral o jugarla para su compañero Balbuena, pero decidió cubrir el esférico y luego regalárselo a Guazá, quien agradeció el favor para marcar el empate previa acción individual.
A los 90’ nuevamente el espigado defensa chiclayano Guadalupe regaló un penal, teniendo la posición ganada decidió complicarse y producto de ello le cometió falta penal a Guazá, quien forzó con el defensa teniendo las de perder. Entonces Núñez dio el triunfo a los bogotanos por 2-1.
Juan Aurich deberá ahora pensar en el torneo nacional, un campeonato en donde si se hace fuerte y en el único que puede conseguir metas y objetivo, como todo elenco peruano, pues ninguno tiene estirpe internacional.
Por: Luis Miguel Guerrero
