En conferencia de prensa, el presidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF), Manuel Burga, confirmó que Joel Sánchez, volante de la Universidad San Martín, dio positivo en el control antidoping del encuentro que Perú sostuvo ante Bolivia por la novena fecha de las clasificatorias al mundial Brasil 2014.
El mandamás del fútbol nacional explicó que el jugador tomó previo al partido en La Paz, un suplemento vitamínico, que le recetó un nutricionista.
Sánchez, quien por el momento tiene una sanción preventiva que le impedirá jugar, dio su descargo a la prensa señalando que “Desde el 2010 estoy con un nutricionista, Rubén Hinojosa, y me incluyó esta sustancia. Solo quería mejorara mi nivel futbolístico, yo no sabía que tenía esa sustancia. No era mi meta sacar ventaja. Por el momento pasan muchas cosas por mi cabeza”
Por parte del club U. San Martín, el gerente deportivo Álvaro Barco lamentó la falta de comunicación por parte del jugador con la entidad santa, además de señalar que la sanción al jugador por parte de la FIFA podría ser hasta de dos años. «Vamos a ayudar al jugador en la defensa. Estamos muy enojados por la falta de comunicación. Nos asombra de que un nutricionista cometa un error así. Se trata de una sustancia que a partir del 2010 se ha suspendido. Pero es muy prematuro hablar, hay que esperar a ver qué sanción tiene, puede ser dos años, puede ser un mes».
Si los hechos han sucedido de esa manera, en mi opinión, es lamentable que un deportista profesional, no comunique por lo menos a los médicos, tanto de su club como de la selección, el que esté recibiendo la ayuda de un nutricionista, pues todo tema de esa magnitud debe hacerse en conjunto. Se trataría de una irresponsabilidad del jugador.
Por Luis Miguel Guerrero.
