En el nacionalismo querían, como sea, tumbarse al ministro de Educación, José Antonio Chang, pero el tiro les salió por la culata. José Maslucán, a nombre de la bancada que maneja Ollanta Humala, promovió la presentación de una moción multipartidaria para someterlo a interpelación, pero en horas de la noche de ayer este fue desautorizado por el vocero de su grupo político, Cayo Galindo.
En el nacionalismo querían, como sea, tumbarse al ministro de Educación, José Antonio Chang, pero el tiro les salió por la culata. José Maslucán, a nombre de la bancada que maneja Ollanta Humala, promovió la presentación de una moción multipartidaria para someterlo a interpelación, pero en horas de la noche de ayer este fue desautorizado por el vocero de su grupo político, Cayo Galindo.
Según publica hoy el diario Correo, el documento contaba con 32 firmas del nacionalismo, upepismo y de la Alianza Parlamentaria, pero Maslucán cometió un error: ausentarse a la hora de la votación en que se definió la invitación al premier Jorge del Castillo por la publicidad estatal en RBC.
Si él hubiese estado presente, Gonzales Posada no hubiera tenido que dirimir tras el empate. Por eso, sus colegas de bancada decidieron retirar sus firmas de la moción-Chang.
Enterado de esto, Maslucán montó en cólera y dijo no entender por qué el portavoz de su grupo, Cayo Galindo, acordó tal cosa. “Sería una estupidez y un error garrafal vergonzoso que decidan el retiro de la moción”, afirmó.
"Mi vocero será responsable de esta decisión, le está dando la espalda al pueblo y yo seguiré adelante con esta moción", indicó.
