{youtube}OwTu3QTolFM{/youtube} (Video Cortesía 90 Segundos) La última vez que se le vio al dirigente de Aidesep, Alberto Pizango, fue ayer en la conferencia de prensa que ofreció juntos a legisladores de la bancada del Partido Nacionalista y tras la masacre ocurrida en Bagua, donde asesinaron a cerca de 20 policías y donde murieron cerca de 25 civiles.
{youtube}OwTu3QTolFM{/youtube} (Video Cortesía 90 Segundos) La última vez que se le vio al dirigente de Aidesep, Alberto Pizango, fue ayer en la conferencia de prensa que ofreció juntos a legisladores de la bancada del Partido Nacionalista y tras la masacre ocurrida en Bagua, donde asesinaron a cerca de 20 policías y donde murieron cerca de 25 civiles.
Enterado que se cocinaba una orden de detención en su contra -que hoy ya es vigente- Pizango ordenó algunas pertenencias y salió oculto por una puerta contigua para abordar un vehículo toyota azul con lunas polarizadas.
Según imágenes del noticiero 90 Segundos, Pizango salió sin su habitual corona de plumas, vestido informalmente y no quiso responder una pregunta más.
La televisora lo siguió por un largo trecho y pudo corroborar que el dirigente, quien promovió la protesta en Bagua, tomó la Panamericana Sur con rumbo desconocido.
Según diversas fuentes si este pretendió fugar lo haría por la frontera con Bolivia. Por ello, se presume, habría tomado la decisión de solicitar asilo político a Bolivia y al régimen de Evo Morales, afín a Ollanta Humala y Hugo Chávez.
