Fue víctima de acoso telefónico por parte de una empresa de TV de paga debido a una deuda de una tercera persona y ahora tendrá que ser indemnizada con la suma de US$ 230.000.
A muchas personas no les gusta recibir llamadas telefónicas automáticas, y a Araceli King seguramente menos, ya que recibió 153 de ellas sólo de parte de una de ellas, la estadounidense Time Warner Cable.
Pero ahora la empresa de TV paga deberá abonar 229.500 dólares por el reclamo de especialistas en seguros por haber realizado 153 llamadas automatizadas en menos de un año al teléfono celular de King, que en realidad estaban destinadas a otra persona, incluso después que ella pidió que esas comunicaciones se detuvieran, según determinó un juez federal de Manhattan.
King, de Irving, Texas, acusó a Time Warner Cable de haberla acosado dejándole mensajes para Luiz Pérez, quien una vez consiguió su número de teléfono móvil, incluso después de que ella dejó en claro eso durante una discusión de siete minutos con un representante de la compañía.
Las llamadas se hicieron a través de un sistema de «respuesta de voz interactiva», diseñado para los clientes que se encuentran retrasados con sus pagos.
Sin embargo, Time Warner Cable respondió que no era responsable ante King bajo el Acta Federal de Protección al Consumidor Telefónico, una ley destinada a frenar los abusos de las llamadas automáticas y el telemarketing, ya que creía que estaba llamando Pérez, quien había dado su consentimiento para recibir esas llamadas.
Pero en la triple indemnización por daños de 1.500 dólares por llamada por violar intencionalmente esa ley, el juez de distrito Alvin Hellerstein dijo que «una empresa responsable» se hubiera esforzado más para encontrar a Pérez y abordar el problema.
También dijo que 74 de esas llamadas habían sido realizadas luego de que King inició su demanda en marzo de 2014, y que era «increíble» creerle a Time Warner Cable cuando dijo que aún no sabía cuál era el reclamo de la mujer.
Mientras tanto, la vocera de Time Warner Cable, Susan Leepson, dijo la compañía con sede en Nueva York que está revisando la decisión.
«Las empresas están utilizando las computadoras para marcar números de teléfono», dijo Sergei Lemberg, abogado de King, durante una entrevista telefónica. «Se benefician de la eficiencia, pero hay un costo cuando hacen miserable la vida de la gente. Y éste fue uno de esos casos».