Este viernes 11 de octubre vence la vigente Ley del Libro y junto con ella se disuelven los beneficios tributarios que contempla la ley.
Con la disolución del Congreso se dejó en el aire la discusión y debate de distintos proyectos urgentes: uno de ellos el de la nueva Ley del Libro.
La aprobación de esta implicaba mantener los beneficios económicos y culturales a los gremios del libro y al público en general.
¿Qué pasaría sin una nueva Ley? La Cámara Peruana del Libro señala que estos serían algunos efectos negativos que impactarían en la industria cultural del libro y a sus creadores:
1- Subida inmediata del precio de todos los libros en 18%, incluido los libros de texto escolar y de plan lector que padres y madres de familia deben comprar en la próxima campaña escolar.
2- Debilitamiento del ecosistema del libro: afectará a librerías, MYPES editoriales, se pondrá en riesgo 40 mil empleos, se debilitará a los actores en regiones. Este escenario fomenta la informalidad y la piratería.
3- Pérdida de competitividad de las editoriales frente a sus pares en el mercado internacional.
4- Complicaciones en las compras públicas de libros. El MINEDU tiene procesos abiertos para compras de bibliotecas escolares.
Además, no se dotaría de nuevos libros a las bibliotecas públicas; familias, niños, niñas y jóvenes tendrán dificultades para acceder a la lectura.
AtenciónAlLibroYA: Este 11 de octubre vence la Ley del Libro
A través de sus redes sociales la Cámara Peruana del Libro lanzó un vídeo alertando que “no queda mucho tiempo” y que “hoy el libro corre peligro”, debido al vencimiento de la vigente Ley del Libro este 11 de octubre. Además, pide que el Gobierno le entregue tiempo al libro y que tome acciones antes de su vencimiento.
El vídeo también recuerda que durante la FIL LIMA 2019, el presidente Martín Vizcarra, en su discurso de inauguración, se comprometió a promover una nueva Ley del Libro: “Como Gobierno creemos que es urgente la aprobación de la nueva Ley del Libro, la cual contempla, entre otras medidas, que los libros no estén afectos de impuesto como ocurre en muchos países del mundo”.
