"No tengo un plan de contingencia, pero creo que los jefes de Estado saben que lo mejor es conversar sin la presencia periodística que invita a decir cosas más llamativas", dijo García al ser preguntado al respecto en una entrevista que publica el diario El Comercio.
Chávez, habitual protagonista de ese tipo de encuentros, llega a la Cumbre de Lima antecedido por ataques verbales contra la jefa de gobierno de Alemania, Angela Merkel, a la que acusó de representar a "la derecha que apoyó a Adolf Hitler", y contra su homólogo de Colombia, Álvaro Uribe, de quien dijo que prepara una guerra por encargo de Estados Unidos.
En la Cumbre ALC-UE, Chávez estará cara a cara con Merkel y Uribe, pero la opinión pública se quedará sin ver qué pasará, porque no habrá presencia de cámaras y lo que suceda adentro se mantendrá en reserva.
El ministro de Relaciones Exteriores de Perú, José Antonio García Belaunde, aseguró al respecto que esa es una modalidad de las cumbres ALC-UE, que ya se aplicó en Viena en 2006, y que no se trata de una medica de precaución ante lo ocurrido en la pasada Cumbre Iberoamericana, cuando el rey Juan Carlos de España le pidió al presidente venezolano callarse.