En declaraciones a la prensa, Kenji dijo que a pesar de ello “no podrán tumbar” a su padre quien fue llevado al Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN), en Surquillo, para determinar que el quiste que tiene en el páncreas es canceroso.
“Es una secuela del régimen cerrado al que fue sometido. No podrán tumbar a mi padre”, afirmó tras indicar que su padre lleva una vida sedentaria que le ha originado esta serie de enfermedades.
El menor de los Fujimori afirmó que los males que padece el ex jefe de Estado se deben al rígido sistema carcelario que se le impuso en la Dirección de Operaciones Especiales (DIROES) de la Policía, en Ate Vitarte, donde se encuentra recluido.
También dijo que el ex mandatario se encuentra sereno y tranquilo. Asimismo, agregó que toda su familia permanecerá a su lado y que él lo acompañará las 24 horas en el INEN hasta que sea llevado nuevamente a la DIROES.