No hubo sorpresas en el debate entre John McCain y Barack Obama y cada uno se mantuvo fiel a sus promesas de campaña, aunque sirvió a Obama para mostrarse como presidenciable frente a sus críticos que acusaban a su juventud a una falta de experiencia, pese a que lleva varios años en el Senado estadounidense representando al estado de Illinois.
Como se esperaba, el encuentro se centro en los dos principales problemas del país, la guerra en Irak y Afganistán y la crisis económica. Así McCain defendió la postura de mantener las tropas en Irak como garantía de la seguridad nacional y sacó a relucir que desde el inicio de la guerra preventiva emprendida por Estados Unidos post 11 de setiembre, la nación no ha sufrido ningún ataque de magnitud en su suelo continental.
En tanto Obama, mantiene la tesis del retorno de las tropas y destinar los recursos a la salud y educación y acuso una falta de sensibilidad a McCain y los republicanos ante la crisis que sufre la clase media por las erradas políticas de Washington que han traído angustia a la población, además del dolor que sufren las madres de los soldados fallecidos en el medio oriente.
Igualmente, también se trato el problema de Rusia, China y Corea del Norte y el peligro que significa que países como Irán o Siria desarrollen armas nucleares que pongan en riesgo la seguridad del mundo, tema en que McCain se sintió más cómodo y se explayó debido a su experiencia como militar, frente a un Obama que se mantiene más por la ruta del dialogo para mantener la paz y destinar recursos a otras áreas que no sea el armamentismo.
La designación de los candidatos a la vicepresidencia Sarah Palin en la formula de McCain y Joe Biden junto a Obama, si bien no ha sido las más acertadas, están cumpliendo su función teniendo en cuenta que el cargo de vicepresidente no es visto de manera tan política como en los países latinoamericanos. Inicialmente la gobernadora de Alaska, Palin, fue vista con simpatía por ser de una familia tradicional y sus posturas contra el aborto, pero algunos errores de comunicación como el decir que sabe cómo resolver el problema con Rusia “porque los pueden ver desde la frontera de Alaska”, le trajo burlas de todo tipo de parte de la prensa estadounidense.
Del otro lado, el desacierto de Obama no haber designado a Hillary Clinton como su compañera de plancha, le puede costar algunos puntos teniendo en cuenta el caudal de votos que tenia Hillary Clinton, pese a que esta ha pedido fuertemente a los electores que voten por Obama para sacar al país de la crisis en que se encuentra ahora, aunque el senador mantiene alguna ventaja en las encuestas, espera conseguir la victoria en los estados claves, sobretodo Florida, para terminar de hacer historia en este país.
Por Juan Hidalgo