Los chinos que estaban a cargo del taller y la fábrica ubicados en los barrios porteños de Villa del Parque y Bajo Flores fueron detenidos y quedaron a disposición de la justicia, informaron fuentes policiales citadas por la agencia estatal Télam.
En ambos lugares fueron encontradas ocho personas de nacionalidad argentina, boliviana y peruana que estaban sometidas a trabajo esclavo.
Numerosos talleres textiles fueron denunciados en los últimos tiempos por someter a sus trabajadores y sus familias al trabajo esclavo.
En varios de ellos se constató que familias enteras eran alojadas en los talleres en condiciones infrahumanas y a cambio de salarios muy bajos para abaratar los costos de producción. En muchos de los casos, los esclavos eran inmigrantes ilegales.