En una clara actitud antidemocrática, la cuenta Twitter de la Casa Rosada que pronto entregará la presidenta Cristina Fernández de Kirchner a Mauricio Macri, fue «robada» por allegados a la aún gobernante.
Se trata de la apropiación de una cuenta que hasta hace horas era oficial y propiedad del Estado, los administradores «K» cambiaron la foto de perfil por una de Cristina y un cuadro de Néstor Kirchner.
La biografía también fue modificada y dejó en claro la maniobra: «Twitter de las Presidencias Néstor Kirchner y Cristina Kirchner 25 de mayo 2003 al 10 de diciembre 2015. No oficial al 10/12/2015».
Rápidamente, el hecho generó amplia repercusión y rechazo en las redes. Periodistas y público en general repudiaron «la mancha más al tigre» que sumó el Gobierno antes de irse.