Según un informe de la Oficina Contra la Droga y el Delito de las Naciones Unidas, publicado por el diario Correo, que se basa en un llamado de alerta de Devida, desde el 2006 se ha elevado la importación de pseudoefedrina, un compuesto de las pastillas contra el resfrío y principal componente de la metanfetamina.
Se presume que gran parte de este insumo ha sido empleado en la producción de metanfetamina, una droga estimulante que activa fuertemente ciertos sistemas del cerebro.
Esta hipótesis se reforzó con la incautación, en junio del año pasado, de más de 20,700 pastillas de Nastizol a una mafia de narcotraficantes, entre ellos un ciudadano mexicano que tenía como centro de operaciones una lujosa residencia en Huachipa.
Apenas tres meses después, agentes de la Dirección Antidrogas (Dirandro) capturaron a narcos peruanos, colombianos, uruguayos e italianos que “exportaban” droga sintética a Francia e Italia.
Sin embargo, el golpe más importante contra este tipo de mafias lo dio la Policía Antidrogas en una vivienda de La Molina. Durante el denominado caso “Doble línea” se decomisó 99 mil comprimidos antigripales que tenían pseudoefedrina entre sus componentes. En ese momento cayeron seis colombianos, dos mexicanos y una peruana.