Según denuncian hoy los diario El Comercio y La República, esta decisión dejó con las manos atadas al fiscal Walter Milla López, quien tuvo que detener la revisión de los discos duros, USBs y laptops incautados a Gianotti y los directivos de Business Track.
Además, dispuso que todo ese material sea entregado en su despacho a la brevedad posible. La resolución precisa que es nula y se da por inexistente la revisión que Milla realizó, en estas últimas semanas, al material incautado.
La decisión sorprendió a Milla, pues el 30 de enero dicha jueza lo autorizó a revisar ese material, en el que se esperaba encontrar información que permitiera identificar a los que pagaron el chuponeo.
La magistrada precisó que cambió de idea a pedido de Giselle Gianotti Grados, pues ella es la única que tiene que organizar el proceso y le corresponde revisar todo ese material.
Precisamente, el fiscal recibió la notificación de este cambio de parecer cuando se disponía a revisar los USBs y discos duros de Gianotti. En las últimas semanas se había analizado la información incautada a los marinos Martín Fernández Vírhuez y Jesús Ojeda Angles.
La jueza explica que es el juez el director de la instrucción y por ende le corresponde organizar el desarrollo del proceso y lo que se debe hacer dentro de este.
Por lo que dispone que la fiscalía remita a la brevedad posible todo el material incautado a fin de que en sede judicial se realicen las diligencias que las partes procesales soliciten oportunamente.
El fiscal Milla pidió y consiguió autorización judicial para revisar esa información, mediante el levantamiento del secreto de las comunicaciones, en dos oportunidades, primero: con el juez Edwin Yalico, y después con la jueza Martínez. (Foto y reproducción, cortesía La República)