Según explicó, esta es una posición compartida por todo el Gobierno y que, incluso, se ha expresado en un proyecto de ley.
“El Gobierno ha expresado su preocupación y la ha condensado en un proyecto de ley, en que nosotros creemos que aquellos procesados por terrorismo no deberían tener beneficios penitenciarios”, señaló.
Velásquez Quesquén refirió que a aquellas personas que han matado muchísima gente y querían derribar el Estado de derecho no tendrían por qué recibir beneficios precisamente de ese Estado contra el que se levantaron en armas.
“No pueden tener beneficios (los terroristas) de un Estado que ellos mismo han querido violentar”, explicó el Premier.