La mujer estaba retenida en una casa del pasaje Olaya del sector de Bolognesi, en Tacna. Disparando al aire, la policía detuvo allí a cuatro secuestradores, dos hombres (de 55 y 30 años), una mujer de 35 y un menor de 17. Uno de los detenidos es chileno.
Salas salió de Chile el 8 de septiembre pasado como garantía del envío de un cargamento de cocaína, el que fue interceptado en Arica por la policía chilena. Al frustrarse el tráfico, los secuestradores llamaron a la pareja de la mujer, José Norambuena Adonis, a la población La Legua de Santiago, exigiendo una alta suma de dinero para liberarla. Dos días después Norambuena alertó a la policía.
El director de la PDI en Arica, Douglas Rodríguez, explicó que transmitió la alerta a la PNP y al consulado de Chile en Tacna. «El contacto fue permanente hasta su liberación», dijo No es primera vez que los narcos emplean «prendas humanas» para garantizar envíos de droga. En 2008, otro chileno estuvo más de dos meses retenido por una banda peruana.