La Oficina de las Naciones Unidas para la Droga y el Delito (ONUDD), reveló que la progresiva y mayor presencia del Estado en las zonas donde opera en narcotráfico ha desatado una respuesta violenta de estas organizaciones criminales, ante la cual las fuerzas del orden no pueden retroceder.
La Oficina de las Naciones Unidas para la Droga y el Delito (ONUDD), reveló que la progresiva y mayor presencia del Estado en las zonas donde opera en narcotráfico ha desatado una respuesta violenta de estas organizaciones criminales, ante la cual las fuerzas del orden no pueden retroceder.
Flavio Mirella, representante de la ONUDD para el Perú y Ecuador, señaló que no es extraño que desde hace un tiempo se produzcan ataques, como el que le costó la vida a un fiscal y tres policías que realizaban un operativo de decomiso de insumos químicos en Tocache (San Martín), meses atrás.
“Una vez que el narcotráfico detecta una mayor presencia del Estado en ciertas zonas, y una vez que no puede usar la corrupción para lograr sus fines, pasan a usar la intimidación y la violencia. Eso es un proceso que se ha visto en varios países”, declaró a la Agencia Andina.
Subrayó, en ese sentido, que la Policía Nacional (PNP) tiene un rol importante que cumplir en la lucha contra el narcotráfico y que no le puede permitir retroceder en ningún momento.
“Lamentablemente estos hechos ocurren, pero demuestra que hay una presencia de la Policía, una presencia de los cuerpos estatales y creo que esto está dando un mensaje claro que aquí (en Perú) la tolerancia al narcotráfico no está aumentando, sino que más bien está bajando”, anotó.
Según las estadísticas oficiales, durante todo el 2007 se registraron 148 atentados contra miembros del Proyecto Especial de Control y Reducción de los Cultivos de Coca en el Alto Huallaga (Corah) y de la Policía Nacional, cifra que supera largamente a los 47 sucesos que se produjeron durante el año 2006.
En ese sentido, el año pasado resultaron heridos 37 personas, 18 pertenecientes del Proyecto Especial de Control y Reducción de los Cultivos de Coca en el Alto Huallaga (Corah), y 13 policías; mientras que en lo que va del año ya se han producido varios ataques a policías y erradicadores de hoja de coca.
