La mucositis oral es una complicación de la quimioterapia y radioterapia para combatir el cáncer que afecta a los pacientes que han sido sometidos a estos tratamientos, sobre todo a quienes reciben radioterapia de cabeza y cuello, así como los que reciben altas dosis de quimioterapia en transplante de células madre.
La mucositis oral es una complicación de la quimioterapia y radioterapia para combatir el cáncer que afecta a los pacientes que han sido sometidos a estos tratamientos, sobre todo a quienes reciben radioterapia de cabeza y cuello, así como los que reciben altas dosis de quimioterapia en transplante de células madre.
Esta complicación también llamada estomatitis, es causada por los efectos sistémicos de los agentes dañinos para las células, de la quimioterapia y de los efectos locales de la radiación sobre la mucosa oral, que se presenta desde el enrojecimiento hasta úlceras graves. Esta enfermedad afecta a más del 50% de pacientes que son sometidos a estos tratamientos.
Los síntomas varían desde el dolor hasta la incapacidad para tolerar la ingesta de los alimentos y bebidas. Además los pacientes con la mucosa dañada y la inmunidad reducida como consecuencia de la quimioterapia y radioterapia, son propensos a sufrir infecciones en la boca, que afecta a las encías y la condición dental, asimismo la capacidad de hablar y la autoestima se reducen. En casos severos puede verse afectada la sobrevivencia del paciente, por la desnutrición y deshidratación que se producen por la dificultad de tragar.
Por lo tanto, es importante prevenir la mucositis, siempre que sea posible o al menos tratar de reducir la gravedad y sus posibles complicaciones, es por ello que el nuevo gel oral bioadherente Gelclair, de Grünenthal Peruana, actúa como protector de las lesiones bucales, reduce las inflamaciones y el dolor, además de favorecer la reestructuración de la mucosa.
Este producto ofrece un efecto barrera en la garganta y en la boca, como mecanismo de acción, con lo que proporciona alivio prolongado al dolor y al proteger la zona dañada ayuda a la renovación del tejido epitelial y normalización de la flora microbiana.
