Hace unos días la constructora chilena Inarco -que oficializó su arribo a Perú el 21 de mayo de este año- se reunió con ejecutivos de la banca peruana para buscar financiamiento para un proyecto. "Esperaba que me dijeran que volviera en unos meses más y eso no pasó. Va a ser más caro el crédito y a lo mejor en vez de financiarme el 70%, me van a financiar el 50%, pero yo honestamente esperaba que no me atendieran y me lo están evaluando", explica uno de los socios de la compañía, Fernando García Huidobro.

Hace unos días la constructora chilena Inarco -que oficializó su arribo a Perú el 21 de mayo de este año- se reunió con ejecutivos de la banca peruana para buscar financiamiento para un proyecto. "Esperaba que me dijeran que volviera en unos meses más y eso no pasó. Va a ser más caro el crédito y a lo mejor en vez de financiarme el 70%, me van a financiar el 50%, pero yo honestamente esperaba que no me atendieran y me lo están evaluando", explica uno de los socios de la compañía, Fernando García Huidobro.

El relato, que forma parte de un informe publicado hoy por el diario El Mercurio, muestra lo que varios empresarios de la construcción con presencia en Perú han visto en ese mercado, que los ha llevado a mantener sus proyectos de desarrollo, pese a la coyuntura mundial.

No se trata de una solución mágica, porque -concuerdan- Perú de todas formas se desacelerará y lo afectará la caída de las materias primas. Y no descartan que ocurran aplazamientos de obras en el retail. Pero en el nicho residencial y de oficinas ven un ambiente más benévolo comparado con las paralizaciones de obras que ya se notan en Chile, sobrestock en algunos productos y restricciones en la banca.

"En Chile, en tantos años de boom ha habido un sobre crecimiento. Cosa que no pasa en Perú. Aquí hay falencia, falta de producto", dice Eric Rey de Castro, socio de Colliers y uno de los más importantes gestores inmobiliarios de ese país.

Los gestores

"Acabamos de tener una reunión de directorio en la cual hemos definido seguir con el mismo plan de inversión que se tenía previsto para 2008 y 2009", dice Fernando Romero Dreyfus, el gerente general de Centenario, en alusión a los proyectos con la chilena Paz Corp, a la que se asociaron este año. Paz Centenario se apresta a lanzar ahora en noviembre su primer proyecto en el distrito de Barranco, que considera una inversión de US$ 18 millones en un edificio de departamentos y planta comercial.

"En un período de contracción, la diferencia de 3 o 4 puntos se nota", dice Fernando García Huidobro respecto del crecimiento de ese mercado. En 2008, el PIB en Perú crecerá en torno al 8% a 9% y la construcción lo hará 14% a 15%. La proyección es que si el PIB 2009 estará en torno a 6%, la construcción será superior.

"Hay más optimismo, el ánimo es distinto. He estado dos veces durante octubre en Perú y la crisis no es el tema central de la conversación. Saben de ella y que va a afectar, pero no los tiene histéricos". Y con tono de humor agrega: "a los dos días de volver a Chile, dije 'me quiero volver a Perú, por el ambiente'.

Inarco postergó en Chile una de tres iniciativas que preveía desarrollar: un edificio de departamentos en Vitacura. En Perú -mercado al que arribó asociada con la local JE Construcciones- no ha postergado proyectos y sigue en pie con un edificio de oficinas para partir en el primer semestre de 2009 y otro de bodegaje (en la zona de Miraflores y Lurin, respectivamente). "Hicimos un plan trimestral, y, dentro de ese plan de crisis, está el traslado de personas al mercado de Perú temporalmente. Reforzar la operación de allá", explica García Huidobro, sobre el traslado de cerca del 10% de su plantilla de profesionales a Perú, con el fin de preservar el recurso humano.

"La percepción nuestra es que el pesimismo que se visualiza en Chile es considerablemente menor en Perú", acota Fernando Zúñiga, gerente general de SalfaCorp Ingeniería y Construcción, firma que en el último mes cerró contratos por US$ 30 millones para 2009 para la expansión de Supermercados Peruanos, del grupo Interbank (Plaza Vea). Y más otros US$ 100 millones "en negociaciones avanzadas" en el ámbito del retail y montaje industrial.

Zúñiga remarca que tiene un proyecto de largo plazo en Perú, que en 2009 aportará cerca del 20% de los ingresos de esta área de la compañía, tras su arribo desde 2007. Hace unos 45 días, Besco, la subsidiaria de Besalco en Perú, se adjudicó un proyecto junto a la local Graña y Montero para levantar viviendas en un paño de 53 mil metros cuadrados enajenado por Edelnor en Lima. Y con el mismo socio se adjudicaron un contrato para un megaproyecto de viviendas en la zona norte de la capital, aunque esta iniciativa ha sufrido reparos (ver recuadro).

El empresario Jorge Gálmez y la sociedad conocida como Grupo Penta -que sólo es un alcance de nombre con el conglomerado de igual nombre de Chile- adjudicarán en noviembre la construcción de la primera etapa del megaproyecto Las Cumbres de La Molina, un conjunto de oficinas tipo Ciudad Empresarial, en un proyecto que considera unos US$ 60 millones.

Vicente Domínguez, director ejecutivo de la Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios de Chile, no obstante, es cauto y remarca que la cantidad de compañías y el volumen de negocios que a ellas les aporta el mercado peruano aún no es tan grande. "Hay una diferencia de cuantía sumamente importante", explica, aunque sí destaca factores que contribuyen al mayor dinamismo allá. Las condiciones de financiamiento y stocks más bajos.

Administrador de contenidos de Grupo Periodismo en Línea

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