{youtube}ah1mTZpBCBk{/youtube} (Video) Aunque usted no lo crea, tras la muerte de policías e indígenas en Bagua, los políticos y oportunistas pescan a río revuelto y usan el dolor y la sangre para ganar réditos. Pero también hay quienes defienden lo indefendible y se expresan con más provocaciones, empezando por el presidente Alan García.
{youtube}ah1mTZpBCBk{/youtube} (Video) Aunque usted no lo crea, tras la muerte de policías e indígenas en Bagua, los políticos y oportunistas pescan a río revuelto y usan el dolor y la sangre para ganar réditos. Pero también hay quienes defienden lo indefendible y se expresan con más provocaciones, empezando por el presidente Alan García.
Según evidenció ayer el programa "Enemigos Íntimos", nuestro presidente calificó como ciudadanos de segunda clase, a los Aguarunas quienes tomaron instalaciones de empresas petroleras, a esto se sumó el cargamontón desinformativo de congresistas del Partido Nacionalista y de un sector de UPP.
Pero si García tuvo esa frase desafortunada, la humalista Yaneth Cajahuanca fue una de las que encendió la mecha de la rebelión de la selva, al mentir en torno al decreto legislativo 1090 y otras normas similares.
No contenta con ello, Cajahuanca se dedicó a provocar a los apristas, en una reciente sesión de la Comisión de Defensa del Congreso y la ministra del Interior, Mercedes Cabanillas, pisó el palito.
"¿Qué hace una profesora en el Ministerio del Interior?", dijo Cajahuanca y luego la ministra le responde, "¿Qué hace una vendedora de gas en el Congreso?"
Entre los oportunistas también aparecen los comunistas de la izquierda radical, Javier Diez Canseco, Ricardo Letts quienes de pronto aparecieron escoltando a Alberto Pizango.
También Mario Huamán y el gremio de la CGTP, quienes coincidentemente organizan marchas en momentos que deberían garantizar la democracia. Saque usted sus conclusiones
