La presidente de la Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas nativas y Asalariadas del Perú – FEMUCARINAP, Lourdes Huanca, advirtió que el uso de semillas transgénicas en los campos de cultivo de diversas regiones del país está volviendo a las tierras estériles y por ende inservibles.
La presidente de la Federación Nacional de Mujeres Campesinas, Artesanas, Indígenas nativas y Asalariadas del Perú – FEMUCARINAP, Lourdes Huanca, advirtió que el uso de semillas transgénicas en los campos de cultivo de diversas regiones del país está volviendo a las tierras estériles y por ende inservibles.
“Para que las semillas transgénicas broten, por haber sido genéticamente modificadas, se requiere el uso de abonos químicos que malogran la tierra, le quita sus propiedades, por eso después de dos siembras esa tierra ya no produce más”, dijo la lideresa de las mujeres del campo.
Explicó que desde tiempos milenarios las mujeres del campo seleccionan las semillas andinas o criollas, las siembran, cosechan y vuelven a sembrar muchas veces más, por que esta práctica no afecta a los campos.
En ese sentido, Huanca demandó al Gobierno que no se olvide de las mujeres del campo, que son pieza fundamental en la alimentación del país, y que toda política que se adopte respecto al agro privilegien a los hombres y mujeres del campo, antes que a las transnacionales extranjeras.
“Las mujeres del campo tenemos derecho a que nuestros hijos reciban una buena alimentación, pero hoy vivimos también la contaminación de nuestros ríos por culpa de las mineras y ninguna autoridad hace algo. Nuestros hijos son los más perjudicados y esa es nuestra principal preocupación”.
Por eso, para hacer sentir su voz, un centenar de mujeres campesinas, nativas e indígenas, irán mañana jueves a las 07:30 a.m. hasta la sede de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) en Miraflores, para dejar un pliego de reclamos. En esa sede dejarán de “regalo” sacos de semillas.
Luego partirán a la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), ubicada en Calle Manuel Almenara 328, Urb. Aurora – Miraflores; para finalmente culminar su recorrido en la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en Calle Las Flores 275, San Isidro.
