Las sequías y el cambio climático le han pasado la factura al Lago Titicaca, que comparten Perú y Bolivia, al punto que el gobierno de Evo Morales ha expresado su preocupación sobre el tema.
Las sequías y el cambio climático le han pasado la factura al Lago Titicaca, que comparten Perú y Bolivia, al punto que el gobierno de Evo Morales ha expresado su preocupación sobre el tema.
Según una alerta lanzada hoy el nivel de las aguas del lago más alto del Mundo, descendió en 4,5 metros en el último mes por la sequía que afecta a esa región altiplánica.
De acuerdo con el viceministro de Defensa Civil, Hernán Tuco, la alarmante falta de lluvias y el intenso calor ponen en riesgo a la biodiversidad acuática, en especial especies como el suche, el carachi y la trucha.
El impacto climático, dijo, también afecta la rica vegetación del embalse navegable más alto del mundo (tres mil 800 metros sobre el nivel del mar).
Por su parte, el director del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología de Bolivia (SENAIM), Félix Trujillo, explicó que el lago sagrado de los Incas sta. cerca de alcanzar el récord histórico que se dio en 1943 cuando la baja de la altura del agua fue de cinco metros.
A juicio del experto, la tendencia es que las aguas del Titicaca sigan bajando. Por su parte, el Consejo Nacional para la Reducción de Riesgos y Atención de Emergencias y Desastres (Conarade), alertó de que un descenso considerable del nivel del agua del lago puede provocar desequilibrios en la flora y fauna y afectar a la pesca.
Por su parte, el viceministro de Aguas, René Orellana, aseguró a Radio Patria Nueva que, como todos los años entre noviembre y diciembre la situación es crítica sobre todo en el altiplano central y en la región del Chaco que son zonas muy afectadas por la sequía.
Un informe de SENAMHI asevera que las altas temperaturas y la falta de lluvias permanecerán en Bolivia hasta marzo de 2010.
