La número dos de Sendero Luminoso (SL), Elena Iparraguirre, parece no estar arrepentida de su pasado y menos de la senda de sangre de dicha agrupación terrorista.
La número dos de Sendero Luminoso (SL), Elena Iparraguirre, parece no estar arrepentida de su pasado y menos de la senda de sangre de dicha agrupación terrorista.
Según revela el diario Correo, la también esposa de Abimael Guzmán, sostuvo que las ideas subversivas nunca mueren e incluso que la cárcel jamás la cambiará.
A través de una carta fechada el 30 de junio último, Iparraguirre asegura que «el tratamiento rehabilitador de la pena no busca imponer una cosmovisión ni cambiar la que se tenga», según lo ha dispuesto el Tribunal Constitucional en el artículo 188 de la sentencia del 3 de enero 2003.
No obstante, Yparraguirre no menciona el artículo de manera completa pues el TC refiere allí que «el carácter rehabilitador de la pena tiene la función de formar al interno en el uso responsable de su libertad. No la de imponerle una determinada cosmovisión (…)».
En la misiva, la camarada Miriam cuestiona el sistema penitenciario establecido por el gobierno y afirma que éste no puede cambiar su ideología, y pretender hacerlo es de mentalidades retrógradas.
«¿Qué régimen de tratamiento tiene por objetivo cambiar ideologías? ¡Ninguno! Pretenderlo es medieval (…) es de mentalidades retrógradas», suscribe.
En otro fragmento, Miriam asegura que ya «no están aplicando la violencia» pero reafirma que muchas de las sentenciadas por terrorismo que están en prisión aún conservan «su pensamiento marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo».
