Al menos 33 personas murieron y 130 resultaron heridas después de que un grupo de hombres armados con cuchillos atacaron a personas inocentes en una concurrida estación de trenes en China.
En la terminal de ferrocarril de Kunming, en la provincia de Yunnan, había decenas de cuerpos tendidos en el pavimento, charcos de sangre y equipajes abandonados, segundos después del ataque mortal.
Las autoridades describieron el incidente como un ataque ‘organizado, premeditado y violento ataque terrorista’. Las víctimas fueron en su mayoría pasajeros que esperaban fuera de la terminal de la estación antes de pasar a los trenes.
La cifra de muertos asciende a 29 transeúntes y cuatro de los atacantes que fueron abatidos a tiros por la policía. Nada se sabe de la motivación detrás del ataque, pero el gobierno chino ha culpado a los militantes de la remota región occidental de Xinjiang, donde hay tensiones entre el gobierno y los separatistas musulmanes.