![[FOTOS] Estas 11 personas perdieron la cabeza por amor](https://i0.wp.com/enlinea.pe/wp-content/uploads/2014/10/poramor.jpg?fit=1024%2C768&ssl=1)
Sufrir una desilusión amorosa, ser víctima de un desengaño o simplemente ser rechazado por la persona que uno ama, puede provocar inesperadas reacciones en una persona, incluso llegar a la locura.
Aquí una lista de 11 personas que amaron y fueron mal pagados, al extremo de llegar a la locura, la destrucción y hasta la humillación.
Muchos reaccionan equivocadamente con violencia, desesperación y no logran contener su odio extremo. ¿conoces de alguien que haya pasado por esto?
2. El hombre que casi muere asfixiado por mandarse por correo a su novia:
Esto ocurrió en Chongqing, China, y va más allá: el enamorado, con ayuda de un amigo, no le avisó a la empresa de envíos que se encontraba dentro de la caja así que hubo un retraso de 3 horas. Declaró: “Traté de hacerle un huequito a la caja, pero era muy gruesa, además no quería dañar la sorpresa.” La historia completa:aquí
3. Pruebas de embarazo POSITIVAS, a la venta:
4. El que deja que su mujer controle su Facebook:
5. El hombre enamorado que solo se tatúa el rostro de Julia Roberts:
6. El hombre que quería tener hijos bonitos y no lo logró:
Un hombre chino, Jian Feng, demandó a su esposa por haber dado luz a niños extremadamente feos. La mujer perdió la demanda y confesó que se había hecho numerosas cirugías antes de conocerlo.
7. La mujer que ha invertido una fortuna en cirugías porque “se enamoró” de una caricatura que le hicieron cuando tenía 15 años:
Krystina Butel dice estar celosa de la caricatura que le hicieron en un viaje a Ibiza y desde entonces se ha venido sometiendo a múltiples cirugías plásticas hasta llegar a convertirse en el dibujo. Más Info: aquí
11. Esta mujer engañada que se arrancó el tatuaje del apodo de su ex-novio y se lo mandó:
Al descubrir que su ex-novio la había engañado, esta chica inglesa decidió que era buena idea arrancarse la piel de su antebrazo donde tenía tatuado el apodo de su ex-amor.
