(Video cortesía Canal 2) Sin sangre en la cara y con total cinismo, el ex ministro aprista Rómulo León Alegría, se pronunció desde la clandestinidad en torno al escándalo de los "Petroaudios" y señaló que no cometió delito alguno en las conversaciones que sostuvo con su socio Alberto Quimper, directivo de Perúpetro. Como se recuerda, ambos habrían favorecido a la transnacional Discover Petroleum para que explote cinco lotes de petróleo en el país.
(Video cortesía Canal 2) Sin sangre en la cara y con total cinismo, el ex ministro aprista Rómulo León Alegría, se pronunció desde la clandestinidad en torno al escándalo de los "Petroaudios" y señaló que no cometió delito alguno en las conversaciones que sostuvo con su socio Alberto Quimper, directivo de Perúpetro. Como se recuerda, ambos habrían favorecido a la transnacional Discover Petroleum para que explote cinco lotes de petróleo en el país.
"Señoras y señores, en este asunto de los petroaudios no hay delito, sólo hay escándalo, no me he coludido con nadie para delinquir. No he ofrecido, ni me ha sido solicitado dinero alguno para obtener una determinada decisión (licitación), tampoco me he coludido con funcionario público alguno para obtener determinado resultado", dijo el cuestionado personaje.
En torno a los audios difundidos por "Cuarto Poder", el oscuro personaje dijo que los audios traducen conversaciones privadas extraídas del ámbito coloquial y agregó que esto se hizo "durante ocho meses de persecusión invadiendo mi privacidad y vulnerando los más elementales derechos constitucionales de la persona humana".
"A partir de estos audios que traducen disparates absurdos y una serie de aspectos que no se condicen con mis convicciones personales sino que responden a una determinada circunstancia. Póngase la mano en el pecho y díganme si alguna vez usted también, en el ámbito de sus conversaciones personales, no han dicho cosas que no reflejan o traducen sus verdaderas convicciones y pensamientos", anotó León Alegría.
Presagio de absolución
En otra parte de su pronunciamiento, León Alegría subrayó que algunos periodistas "han hecho un escándalo" y "han llegado a hacer leña del arbol caído, enlodando honras y mancillando nombres".
Luego, como si fuera un presagio de que podría ser exculpado por las autoridades judiciales que lo investigan, el oscuro personaje señaló: "¿Me pregunto que pasará cuando al cabo de las investigaciones preliminares se decide que no hay delito, que sólo es escándalo. ¿Quien me va a devolver la honra?".
Se fue contra Alan
Pero León Alegría también se dio el lujo de arremeter contra la clase política que pidió su investigación y captura y dijo que lamentablemente "algunos políticos, en una práctica de las más viles, de esta actividad, han medrado con este asunto pretendiendo llevar agua para su molino".
"Los más importantes representantes del gobierno se han sumado al cargamontón, el propio presidente de la República (Alan García), me ha estigmatizado y eso me apena profundamente porque es injusto y porque no corresponde a la veracidad de los hechos y a la majestad de su condición", indicó.
¿Le soplaron los movimientos palaciegos?
Casi como enterado perfectamente de los movimientos de las autoridades del gobierno de García, León Alegría comentó también que "un edecán fue a medianoche al Ministerio Público" para presionar sobre su caso.
Pero luego agregó que una fiscal y un juez (en clara alusión al magistrado Jorge Barreto), que no se dejó presionar tuvo como respuesta "la amenaza de la OCMA".
"Un ministro del Interior que apura mi detención y el allanamiento de mi domicilio. Y la ministra de Justicia presionando y el primer ministro presionando. Un linchamiento público", anotó.
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Compás de espera
En su pronunciamiento, León Alegría también comentó que, aunque inicialmente decidió ponerse a derecho, tuvo que dar un "compás de espera" ante el "linchamiento". "Pensé en que no es conveniente sumarse para que se haga leña del árbol caído", finalizó.
Asimismo insisitó en que la empresa Discover Petroleum International, "cuyas autoridades son del más alto nivel" no necesitaban ayuda para ganar la cuestionada licitación de los cinco lotes de petróleo.
"Petroperú y Perúpetro, empresas que recién he conocido, a partir de esta representación que tuve y que sólo se limitaba a asesorarlos y orientarlos para establecerse y adecuarse a las normas del país. Son buenas empresas, con sus autoridades absolutamente idoneas, por eso los contratos que se han ganado lícitamente son favorables para el país y la empresa nacional", remarcó para luego decir con cinismo "no seamos torpes de echar por tierra esta excelente oportunidad de inversión y desarrollo para el país". El controvertido personaje agregó tener "la suficiente fortaleza, espiritual y moral para luchar por la verdad".
Finalmente se dirigió a sus hijos y les pidió tener la seguridad de que no es un delincuente. "No he cometido delito alguno, sólo estamos frente a un escándalo que denigra a la propia condición humana", concluyó.
