El Pleno del Congreso vota este lunes por tercera vez el voto de confianza para el Gabinete Ministerial que preside René Cornejo, luego de no conseguir el respaldo mayoritario de los parlamentarios el pasado viernes.
De no obtener mayoría calificada, el Jefe de Estado Ollanta Humala tendría que nombrar otro gabinete o remover algunos ministros.
Al respecto, el Comité Ejecutivo Nacional del Partido Nacionalista Peruano y el Grupo Parlamentario Nacionalista, admitieron que el Congreso no ha dado un claro respaldo al Gabinete Cornejo, que presentó este viernes su plan de trabajo al país, «lo que ha obligado a convocar una nueva sesión plenaria para este lunes 17 de marzo».
«No obstante, tenemos confianza en que el Parlamento estará en condiciones de superar el impase que ha generado su votación y asegurar la gobernabilidad que el país requiere. El plan de trabajo del Gabinete Cornejo se sostiene en cuatro propósitos fundamentales para la población que nadie puede cuestionar: mejorar la calidad de los servicios de educación y salud, implementar acciones efectivas de seguridad ciudadana y seguir captando inversiones para asegurar el crecimiento económico continuo», explicaron en un comunicado público.
Asimismo precisaron que el Partido Nacionalista Peruano y su bancada en el Congreso «están abiertos al diálogo para superar las divergencias anteponiendo el interés nacional y la estabilidad de nuestras instituciones a intereses partidarios o subalternos».
«Nuestra voluntad es contribuir a que se supere esta situación, permitiendo que el Ejecutivo pueda retomar rápidamente su trabajo de gobierno y agilizar los urgentes proyectos en curso: las obras de infraestructura, la modernización de la refinería de Talara, el Gasoducto del Sur, el Metro de Lima y Callao, la Longitudinal de la Sierra, el aeropuerto Chinchero del Cusco, hidroeléctricas; carreteras, hospitales y colegios», señalaron los nacionalistas.
SIN NEGOCIACIONES. El Partido Nacionalista agregó -sin embargo- que no aceptará, en ningún caso, que el necesario consenso democrático y el consecuente voto de confianza, «implique negociaciones sobre asuntos que no estén guiados por el interés nacional y el respeto a la institucionalidad».
«El crecimiento económico, los importantes proyectos e inversiones, el conjunto de los programas sociales no pueden ni deben sufrir el impacto de divergencias políticas expresadas en esta votación parlamentaria y que sólo generan un clima negativo para la buena marcha del país», precisaron.