"¡Eres una sudaca ignorante, vete a tu país, que vienes aquí a robarnos el trabajo!". Le dijo un revisor del Metro (de Madrid) a Carolina Rospigliosi, de 44 años, el pasado viernes, cuando se negó a darles su DNI. Así lo recoge la denuncia que presentó esa misma noche esta panadera de origen peruano, pero con doble nacionalidad.
"¡Eres una sudaca ignorante, vete a tu país, que vienes aquí a robarnos el trabajo!". Le dijo un revisor del Metro (de Madrid) a Carolina Rospigliosi, de 44 años, el pasado viernes, cuando se negó a darles su DNI. Así lo recoge la denuncia que presentó esa misma noche esta panadera de origen peruano, pero con doble nacionalidad.
Según relata, tras el altercado con el revisor, dos vigilantes de seguridad de la estación de Oporto le retorcieron el brazo para quitarle el móvil con el que ella les había fotografiado. En esta estación tres vigilantes agredieron a otro inmigrante en marzo de 2007 y lo difundieron por internet.
Eran las 20.15 de la tarde cuando Carolina iba a hacer un trasbordo en Oporto (L-5 y 11), venía de Urgel. Una revisora le pidió el billete. Ella se lo entregó, pero la empleada aseguró que el título no estaba validado, según la denuncia. Fue entonces cuando le pidió su DNI y Carolina se negó: "Se lo daré a la policía, llámenlos", respondió. Otro inspector insistió y ella se negó de nuevo. "Me insultó y le saqué una foto con el móvil. Me pidió que le diera mi teléfono y me opuse".
{xtypo_quote} De repente dos guardias de seguridad inmovilizaron a Carolina sujetándole los brazos y la revisora le quitó el móvil. "Me tuvieron allí en el andén hasta las 21.47, insultándome mientras yo lloraba", recuerda. {/xtypo_quote}
Luego la subieron a la entrada de la estación y le propusieron que se marchase. Ella se negó hasta que habló por teléfono con una amiga. "No me dejaban coger el móvil. Marcaron ellos y me pusieron el teléfono en la oreja para hablar. Mi amiga avisó a la policía y me pude ir por fin con mi teléfono después de que borrara la foto".
Buscando testigos
Rospigliosi lo denunció en la comisaría de Carabanchel y busca viajeros que vieran lo ocurrido para el juicio. Metro de Madrid aseguró que estos incidentes quedan reflejados en expedientes de seguridad, pero no dio su versión porque a las 20.00 sus responsables ya no pudieron verificarlos. (Adn.es)