Una lamentable contradicción. Mientras el presidente Alan García regresó al Perú desde Brasil con un millonario compromiso de inversión, en la localidad peruana de Iñampari -fronteriza con la nación carioca y Bolivia- nuestra bandera peruana luce maltratada, rota y ya casi ni flamea.
Una lamentable contradicción. Mientras el presidente Alan García regresó al Perú desde Brasil con un millonario compromiso de inversión, en la localidad peruana de Iñampari -fronteriza con la nación carioca y Bolivia- nuestra bandera peruana luce maltratada, rota y ya casi ni flamea.
Según fotografías publicadas hoy por el diario "Correo", a diferencia de las banderas de las naciones vecinas, el pabellón nacional es el más descuidado en el puente internacional Wilson Pinheiro, donde existen tres mástiles con las banderas de los tres países visitado por turistas nacionales y extranjeros.
Los peruanos que llegan hasta allí sienten vergüenza por esta afrenta contra el símbolo patrio. Un compatriota manifestó que ninguna autoridad es capaz de cambiar la bandera peruana por otra en mejor estado.
Cabe recordar que en un concurso realizado en una página web de España, nuestro símbolo patrio quedó como la segunda bandera más bonita del mundo, gracias a los votos de todos los peruanos que amamos nuestro país.
Por ello, no es justo que el pabellón nacional luzca descuido frente la mirada pasiva de las autoridades. (Foto cortesía Correo)