Otras triste y emotiva historia en torno a las víctimas de la tragedia del avión de Malaysia Airlines derribado por un misil al este de Ucrania, está dandoda la vuelta al mundo.
Se trata de la imagen del adolescente Gary Slok y su madre Petra, ambos holandeses que viajaban a un encuentro de familias monoparentales en Malasia. Lamentablemente no pudieron llegar a su destino en Kuala Lumpur.
Afín a la moda selfie, el joven de 15 años se tomó un autoretrato poco antes de despegar e incluso la envió a sus amigos y familiares. Slok no era menos popular, pues se desempeñaba como portero de un equipo del este de Holanda.
En el avión malasio viajaban un total de 298 personas pero todos murieron.