Aunque no lo creas, consumir cerveza con moderación es beneficioso para la salud al extremo de que el lúpulo, sustancia que se encuentra en dicha bebida alcohólica, puede impedir la formación de tumores y además tiene efectos antiinflamatorios en el cuerpo humano.
Según recientes estudios realizados en el Centro Alemán de Investigación del Cáncer, el Xanthohumol está en el lúpulo de la cerveza y tiene la propiedad de retrasar el envejecimiento neuronal, pero además tiene otros beneficios importantes para el organismo.
En suma, la cerveza retarda los efectos de enfermedades degenerativas como el Alzheimer y el Parkinson, males que tienen efectos irreversibles pero pueden controlarse. La Sociedad Americana de Nefrología también rescató otra cualidad de la cerveza, pues consumirla moderadamente disminuye la posibilidad de formar cálculos renales (piedras en los riñones).
De hecho la cerveza puede ayudar a liberar el cuerpo de impurezas en el aparato renal casi como consumir agua con mucha frecuencia.
Además, y por si fuera poco, estudios en Londres revelan que la cerveza ayuda a promover la pérdida de peso porque mejora nuestra flora intestinal. Entonces no temas en celebrar con una cerveza este fin de año pero siempre con moderación.
