La derrota electoral sufrida el 10 de abril ha dolido profundamente a los ‘compañeros’. A fines de junio, luego de la segunda vuelta entre Ollanta Humala y Keiko Fujimori, el Partido Aprista Peruano (PAP) realizará el congreso nacional 26 para renovar a su dirigencia, la cual había sido elegida hace poco más de un año.
La derrota electoral sufrida el 10 de abril ha dolido profundamente a los ‘compañeros’. A fines de junio, luego de la segunda vuelta entre Ollanta Humala y Keiko Fujimori, el Partido Aprista Peruano (PAP) realizará el congreso nacional 26 para renovar a su dirigencia, la cual había sido elegida hace poco más de un año.
El presidente de la Dirección Nacional de Política, Javier Velásquez Quesquén, asumió su responsabilidad en la debacle electoral (de una bancada de 36, en el actual Parlamento, solo habrá cuatro apristas en el próximo).
“Yo voy a dejar el cargo. Este resultado es consecuencia de una serie de causas. Hay una responsabilidad política”, comentó Velásquez en diálogo con El Comercio. ¿Y cuál fue el principal error político? “No tener candidato presidencial”, respondió.
Velásquez Quesquén también compartió la opinión de la congresista aprista Mercedes Cabanillas, quien el lunes declaró que “la corrupción minó al gobierno y perjudicó al partido”.
“No podemos estar de espaldas a esa realidad. Los enemigos del partido aprovecharon esas situaciones para generalizar”, indicó el congresista.
En cuanto al otro responsable de lo ocurrido con el PAP, el secretario general aprista, Jorge del Castillo, este mantiene aún su cura de silencio (y lo hará al parecer hasta fin de mes), pues ha sido el centro de varias críticas.
