Luego de que el presidente regional de Áncash, César Álvarez, calificara de homosexuales a los sacerdotes del país en un intento por cuestionar a una radio local administrada por religiosos dominicos, monseñor Luis Bambarén salió ayer al frente y no descartó iniciar acciones legales.
Luego de que el presidente regional de Áncash, César Álvarez, calificara de homosexuales a los sacerdotes del país en un intento por cuestionar a una radio local administrada por religiosos dominicos, monseñor Luis Bambarén salió ayer al frente y no descartó iniciar acciones legales.
"Hay un refrán que señala lo siguiente: 'De la abundancia del corazón habla la boca', y si de la boca de Álvarez sale basura, ¿qué tiene en el corazón este señor? Ha insultado y ha criticado a todo el mundo. Que se atenga a las consecuencias de lo que ha dicho: esto no se va a quedar así", sostuvo el exobispo de Chimbote.
Bambarén adelantó que la Iglesia analiza qué medidas tomará y cuestionó a Álvarez por recurrir al insulto y al agravio. "Una persona que no ha hecho nada por Áncash, y venga a agraviar a toda la Iglesia, no se pude permitir. Y encima se hace llamar cristiano", comentó muy indignado.
El representante de la Iglesia anunció que el próximo jueves se tomará una decisión con respecto al tipo de acción que se seguirá, no descartando incluso acudir a los tribunales.
Como es público, Álvarez enfiló sus baterías contra los periodistas que trabajan en la ancashina Radio Santo Domingo, e incluso criticó a los sacerdotes que la administran. "Hay otros curas homosexuales. Ahí están en contubernio con periodistas, ahí creo que están en amores los curas homosexuales con los periodistas", declaró en una entrevista a un canal chimbotano
