La esposa del piloto Alfredo Manuel Soberón Lozano, al mando del helicóptero siniestrado en la provincia cusqueña de Quispicanchis, le pidió a la empresa Helicusco no dejar a su familia en el desamparo.
“Mi esposo era el sostén de toda mi familia. Solo pedimos que la empresa nos apoye, que no nos deje en el desamparo”, dijo.
Pese a que Violeta Ramírez Flórez y Soberón Lozano estaban separados hace varios meses, ella recordó la última vez que conversó con él.
“Hace solo dos semanas él me mandó a decir con la mayor de mis hijas para reunirnos y conversar. Ahora solo pido que el rescate sea rápido”, manifestó al diario El Comercio.
Ramírez Flórez tuvo cuatro hijos con el piloto. Tres mujeres y un hombre, que cumplirá 11 años el 16 de junio que viene. “Mis hijas y mis nietos están en Lima y están destrozados con la noticia. Yo me encuentro en Chiclayo”, comentó.