La actual selección campeona de América, Uruguay, derrotó a Perú por 4-2 en el Centenario y se recuperó del empate ante Venezuela en condición – también .de local. Con el triunfo ante los peruanos los celestes sumaron 11 puntos ubicándose en la segunda posición de las Clasificatorias al mundial Brasil 2014, mientras que la selección peruana jugadas seis fechas se encuentra en el último lugar.
Los locales, necesitados de una victoria ya que igualaron en la fecha anterior 1-1 ante Venezuela en su propio reciento, atacaron desde el inicio, haciéndoseles un partido fácil en ofensiva por la pobre labor de la retaguardia visitante. Los tres centrales nacionales dudaron constantemente y por las bandas Advíncula y Yotún eran una puerta abierta para el rival.
El único volante de marca, Antonio González, no fue nunca solución pues los uruguayos no tuvieron problemas para buscar el arco de Penny. Cruzado y Ramírez cooperaron en la distribución cuando Perú tuvo el esférico aunque le costaba hilvanar juego ofensivo. Por último Fernández y el batallador Paolo Guerrero trataban de preocupar a la zaga local.
Con todo ello, era fácil dilucidar que el primer gol uruguayo se vendría en cualquier instante y así fue. Cuando el reloj indicaba los 14’ un balón desde la esquina fue cabeceado por Coates y antes de que Penny agarre el esférico Luis Suárez la desvió sutilmente ante sorpresa del meta peruano. El balón habría sido rechazado por Antonio González luego de que cruce la raya de meta y el juez de línea en una decisión quizás polémica dio el gol. Desde mi punto de vista, si fue gol, por cuanto el pie del volante de Universitario estaba dentro del arco nacional en su totalidad.
A los 29’ Cruzado perdió el balón en una salida blanca y roja, Suárez dentro del área centró un balón rasante que se desvía en Ramos, por lo que Penny no logra atajar con seguridad el esférico (error suyo), dejando el rebote a merced de Maximiliano Pereyra para anotar el 2-0 a favor de Uruguay. Un resultado justo hasta ese momento por los intentos locales y los errores infantiles peruanos en defensa.
A los 39’ una subida peruana originó un centro de Yotún – lo mejor que hace dentro de sus limitaciones es usar la banda cuando ataca – permitió el autogol de Godín a favor de la visita. Perú no había hecho mucho en ofensiva, sólo Paolo Guerrero era una preocupación, a decir verdad, lo fue siempre que Perú buscó crear peligro.
En el inicio del segundo periodo, Markarián incluye a Lobatón en vez de un desordenado Gonzales, entendiendo que Perú debía arriesgar en busca de conseguir un buen resultado. Con el cambio la selección mejoró, intentó jugar. Vale anotar que en esta etapa si hubo compromiso y entrega total de los jugadores, en comparación al primer periodo, por lo que a pesar de la derrota no se le debe reprochar las ganas que puso nuestra limitada selección de fútbol, a la que le faltaron hombres importantes en el armado del once patrio.
A los 48’, la garra, empuje, fuerza, valentía y compromiso de Paolo Guerrero tuvo su premio. El “9” bajó con el pecho un balón proveniente del pivoteo de Fernández, y con la marca de Godín prácticamente colgado sobre su cuello y espalda bajó el balón rematando rápidamente por sobre la pierna incluso de Coates, marcando el empate.
Uruguay adelantó sus líneas un rival que se batía en defensa y cada vez que la tenía intentaba jugar. A los 55’ Álvarez comete un penal irresponsable sobre Cavani, el cual Penny se lo ataja grandiosamente a Forlán.
EL 3-2 a favor de Uruguay llegó mediante un cabezazo de Cristián Rodríguez quien sólo – prácticamente – la introdujo al minuto 62’. Previamente, el meta peruano del Juan Aurich había salvado en una anterior jugada su arco, así como también lo hizo en dos oportunidades antes del tanto local.
Perú con el marcador en contra intentó hacer daño al arco local y contó con dos opciones claras: La primera de Fernández quien no conectó bien un centro de Paolo Guerrero que luchó con todo el balón para poder habilitar al delantero aliancista y luego la chance de mayor peligro la ocasionó Ramírez (de buen partido) cuyo cabezazo fue controlado con miedo por Muslera.
Pasaban los minutos y cada vez que Perú apostaba por el ataque se descuidaba atrás, por lo que crecía la figura de Penny. Pero a 90’ un contragolpe celeste ocasionó finalmente el 4-2 a favor de los locales mediante Eguren.
La selección peruana cayó por cuarta vez consecutiva, estos dos últimos encuentro con un once “parchado” por las ausencias de elementos de mayor experiencia. En síntesis, más allá de las derrotas, se debe valorar (aunque poco sirva) las ganas y el coraje que le puso el combinado nacional ante Colombia y en el segundo tiempo contra Uruguay.
Lo que queda confirmado es el corazón, juego y ganas de no perder de Paolo Guerrero, aunque debe controlar su temperamento. El delantero del Hamburgo demostró su nivel y si bien es cierto no tendrá la publicidad de Falcao García ni del tridente uruguayo (Cavani, Suárez, Forlán) es un gran jugador, de los mejores en América. Para mí, Paolo Guerrero es más completo que los nombrados (pelea, soporta las marcas, tiene valentía, coraje, desborda rivales, preocupa a los defensas y técnicos, etc), los cuales tienen más nombre por su nacionalidad y también porque en el fútbol lo que vale son los goles y como definidores son A1.
Como anécdota, Paolo Guerrero llega a los 3 goles en las Clasificatorias, mismo número de Perú en cuanto a puntos en la tabla de posiciones y es por eso que se ubica último. El “9” llegó al cuarto lugar de la tabla histórica de goleadores peruanos con 19 anotaciones.
Por: Luis Miguel Guerrero
