El papa Francisco decidió acercarse a los peregrinos congregados en la plaza de San Pedro en Roma, así que rompió el protocolo, se bajó del papamovil y se acercó a miles de fieles.
Su Santidad ha recorrido a pie diversas zonas de la plaza de San Pedro casi sin custodia, desafiando su seguridad y dejando atrás los temores de probables atentados contra su vida.
El Papa Francisco se acercó a una persona con discapacidad que acudió a la plaza en los brazos de un familiar. Un noble gesto del nuevo Pontífice.
El Papa pronunció luego la esperada homilía en esta misa concelebrada por todos los cardenales presentes en Roma, y contará con la participación inédita en la liturgia de los hermanos franciscanos del convento de La Verna, situado en las montañas de Toscana.