Ariel Bracamointe Fefer, hijo de la fallecida empresaria Miryam Fefer, rechazó y desestimó las acusaciones del sicario colombiano Alejandro Trujillo Ospina y los supuestos elementos probatorios presentados por su hermana Eva Fefer.
Como se recuerda hoy se inicia la audiencia final de este caso y el tribunal supremo podría ratificar o anular la condena de 30 años de cárcel -en última instancia- impuesta contra Eva Fefer por el delito de parricidio. Desde Estados Unidos y vía Skype, Ariel Bracamonte dijo a Canal N que confía en que se haga justicia.
«Los jueces de la Corte Suprema, deben basarse en la opinion de lo actuado, más que en mi opinión..Le pido a la Corte Suprema que la decisión sea correcta, así tengan poder los abogados, que se ratifique el pedido fiscal (que pidió la condena)», dijo.
Sobre la acusación directa de Trujillo Ospina, quien dice que fue el y no Eva quien le dio las llaves de la casa donde se encontraba la empresaria, Ariel Bracamonte recordó que el sicario siempre ha declarado de acuerdo a su conveniencia.
«Lanzó más acusaciones para negociar su pena, entonces hay que preguntarle ¿quien gana con estas nuevas declaraciones?, no gano yo porque me está perjudicando. A mi ya se me investigó, no soy sospechoso, pero vean quien gana con este tipo de testimonios, ni siquiera está confirmado si él escribió cartas y emails que tanto se presentan», sostuvo.
Ariel desestimó además los supuestos correos electrónicos, donde aparecen pruebas en su contra. «El canal de TV prometió que iban a presentar estos correos a un perito y los peritos señalaron que no era posible determinar su veracidad», precisó.
Recordó además que tanto su hermana como su amiga Liliana Castro son las únicos sospechosas en este juicio. «Yo fuí la única persona que luchó para que este tipo (sicario Trujillo Ospina) esté en Perú, a este sicario lo traje yo», indicó.
El hijo de Miryam Fefer también consideró lamentable las declaraciones de su padre Marco Bracamonte, quien hoy defiende a su hermana y lo acusa a el. «Es lamentable que por defender a su hija quiera embarrar a su hijo, él nunca fue padre realmente», insistió.
Recordó que su madre siempre le inculcó que le deba respeto a su padre, pero siempre los tuvo en abandono. «Mi padre trabaja para la empresa de mi hermana, recibe un sueldo de su hija y empieza a gozar de todas las gollerías que tiene. Nos deja la interrogante si hace esto por dinero o porque ama a su hija», remarcó Ariel.