El cuerpo sin vida y calcinado de Jennifer Cadillo Muro, joven peruana que era buscada desde el 23 de febrero pasado en Argentina, fue hallado este jueves en un cementerio en la localidad de Merlo. Los restos de la joven estaban calcinados y fueron sepultados como NN el 24 de febrero.
Carlos Smith, de 48 años, está detenido y era el único imputado por la desaparición de la joven. Ahora que hallaron el cuerpo podrían cambiar la carátula a femicidio. Una huella dactilar sería la clave.
El procesamiento del único detenido había sido solicitado por la fiscal Lorena Carpovich, a cargo de la Unidad Funcional de Investigaciones N° 21 de Malvinas Argentinas.
Lourdes, madre de Jennifer Cadillo Muro, dijo que el imputado parecía obsesionado con Jennifer, a quien había conocido tres años antes, cuando trabajaba en una agencia dedicada a la venta de autos.
Además de las contradicciones del imputado, la fiscal Carpovich tuvo en cuenta el hallazgo de huellas de Jennifer en el automóvil en el que se movilizaba para pedir procesamiento. El imputado tiene la posibilidad de apelar la resolución.
IDENTIFICACIÓN. Los familiares de Jennifer fueron convocados para tomárseles muestras para ADN, al cabo de lo cual se determinó la identidad de la víctima.
El padre de la chica dijo a la prensa que «no entiendo cómo la sepultaron al día siguiente de su asesinato, sin que avisara nadie sobre la aparición de un cuerpo ni en ese momento, ni después cuando se conoció que se estaba buscando a una joven. Es rarísimo».
Juan Darío, tío de Jennifer, confirmó que los resultados dieron la certeza de que era la chica. También contó que habló dos veces con el hombre sospechado del crimen.