Serena Williams (1° WTA) derrotó por 6-4 y 6-3 a la ucraniana Elina Svitolina (20° WTA) en una hora y 27 minutos, consiguiendo acceder de esta forma a su segunda final consecutiva del Masters 1000 de Cincinnati, donde tratará de retener el título alcanzado el año pasado.
Pese a mostrar algunas imprecisiones, la estadounidense impuso su jerarquía sosteniéndose en su servicio y a medias en la devolución, factor este último muy irregular tras sumar 30 puntos sobre un total de 60 intentos para terminar quebrando en 4 ocasiones (dos más que su rival).
En lo que respecta al saque, la local mantuvo con el primero una solidez de 30 puntos ejecutados sobre 38 disputados (78%) pero con el segundo terminó en deuda, ya que alcanzó a celebrar 13 de sus 33 impactos (39%).
La número uno de la WTA tendrá como rival el día de mañana a la rumana Simona Halep (3° WTA) quien en una hora y 8 minutos de juego derrotó por 6-1 y 6-2 a la serbia Jelena Jankovic (25° WTA).
Halep duplicó en puntos de devolución a su adversaria (36-17) que lo mejor que hizo en el encuentro fue quebrarle dos veces el servicio a la ganadora en igual cantidad de oportunidades.
Luego, el partido fue de un solo lado gracias a una desacertada Jankovic, quien además de cometer errores se mostró débil con su servicio a tal punto de que sólo consolidó a favor 16 de los 36 puntos que jugó con el primer saque (44% de eficacia) y 7 puntos de los 23 con el segundo (27%).
Lo descrito líneas arriba, es la razón del porqué Halep vulneró en 7 ocasiones el servicio de Jankovic. Por lo demás, y sin ser demasiado efectiva, la rumana se llevó un partido de manera justa.
Por: Luis Miguel Guerrero.