Peter Cárdenas Schulte, el ex cabecilla del grupo terrorista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) quien salió libre tras cumplir condena a 25 años de prisión por terrorismo, terrorismo agravado y contra la fe pública sostuvo hoy que le gustaría apoyar una candidatura de izquierda con miras a las elecciones del 2016 y pidió perdón por las atrocidades y crímenes de su agrupación terrorista en los años 80.
Peter Cárdenas Schulte sostuvo además que ya cumplió su condena por los delitos de terrorismo pero nadie lo podrá cuestionar por ser corrupto.
En una entrevista concedida al programa de televisión «Punto Final», el ex emerretista manifestó que no volvería a formar parte del grupo terrorista ya que resultó ser «un fracaso total».
«Pedí perdón a todas las personas que de alguna manera habían sido perjudicadas. Yo sí me arrepiento […] Visto lo que he visto, y hasta el punto en que he llegado, obviamente que no me metería [al MRTA] porque ha sido un fracaso total», indicó en diálogo con el periodista Augusto Álvarez Rodrich.
En línea con ello, Peter Cárdenas le recomendó a los jóvenes «que se olviden de la lucha armada, de la violencia, porque eso no conduce a ninguna parte». «¿Usted se imagina yéndome al monte yo? Yo tengo 60 años. Hace 25 años yo no sabía lo que iba a pasar», acotó.
Por otro lado, el ex cabecilla negó que haya tenido alguna responsabilidad en el asesinato del ex ministro de Defensa Enrique López Albújar, no obstante sostuvo que tenía experiencia en negociar secuestros y admitió que organizó las «cárceles del pueblo».
«Participé en el secuestro de Héctor Delgado Parker. Sí, también en el de Hory Chlimper […] puedo ser terrorista y hasta asesino, pero nunca fui corrupto ni me metí con el narcotráfico», agregó.
En otro momento, Peter Cárdenas afirmó que al interior de la cárcel de la Base Naval del Callao tuvo relación con el ex jefe del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), Vladimiro Montesinos, a raíz de una invitación que le cursó el ex asesor.
Del mismo modo, indicó que conversó en varias oportunidades con el ex líder del grupo terrorista Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, con quien -según dijo- llegó a materializar «una especie amistad».
«Hablaba con él porque quería entender cómo funcionaba el ‘pensamiento Gonzalo’, pero nunca lo entendí […] Abimael Guzmán sabe que va a morir en prisión», agregó.
El ex emerretista manifestó que su esposa y sus hijos esperan que pueda viajar a Europa y vivir allá. También aseveró que durante el tiempo que ha permanecido preso, la justicia ha solicitado informes a los bancos, «a todo el mundo a ver si tengo algo, pero yo no tengo dónde caerme muerto».
Por último, el ex cabecilla dijo que le «encantaría apoyar a alguna candidatura de izquierda, si es que me aceptan».
