El anunciado paro de transportistas del Callao contra la Reforma emprendida por la gestión de la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, genera esta mañana problemas y caos entre pasajeros que buscan llegar temprano a sus centros de labores o estudios.
Como se recuerda, los transportistas del primer puerto se manifiestan en contra de la Reforma del Transporte, en especial del impedimento de ingresar por el Corredor Azul.
Según RPP y ATV Noticias, en el cruce de las avenidas Colonial y Faucett hay muy pocos buses en las primeras horas del día. Solo se aprecia vehículos que cubren la ruta Callao- Lima que cobran S/.2.50 hasta la avenida Grau.
En la avenida Néstor Gambeta los taxis colectivos piden 10 soles para llevar hasta el centro de Lima, mientras los usuarios esperan más de hora y media por un bus.
En el cruce de Faucett y La Marina había mucha gente en los paraderos. Allí, los taxis colectivos cobran 5 soles para movilizar hasta Rivera Navarrete en San Isidro
Entre Faucett con Venezuela la línea Lurigancho-Venezuela habían como siete cústers que ofrecían sus servicios desde la avenida Venezuela hasta Chosica por dos soles.
En la avenida La Marina no habían buses, gran cantidad de pasajeros esperan alguna movilidad, mientras algunas unidades de transporte cobran hasta S/2.50 cuando la tarifa normal es 1 sol. Los taxis cobran hasta 20 soles hasta Santa Anita.
En el paradero de Ciudad del Deporte por Néstor Gambeta en el Callao la gente, que ignoraba que se realizaba un paro, caminaba hasta diez cuadras; entre tanto, los colectivos cobraban hasta diez soles.
Dirigentes niegan versión de autoridades de Lima
La dirigenta de los transportistas chalacos, Marisela Millán negó que el paro solo se sienta en el primer puerto, tal como afirmara más temprano el teniente alcalde, Hernán Núñez, encargado de la Municipalidad de Lima.
«Que se pasee (Núñez) por la avenida Javier Prado y que diga si es que solo en el Callao se siente el paro», dijo.
Asimismo, dijo que el teniente alcalde está totalmente equivocado al afirmar que la movilización tiene intereses económicos y políticos de las autoridades del Callao. «Lo que pasa es que Núñez no quiere reconocer lo mal que se ha implementado ese corredor (Corredor Azul). Nuestro reclamo para nada es político ni económico. Lo que estamos haciendo es proteger el trabajo y la inversión de los peruanos», concluyó.