Ya es tradición católica y como cada 1 de noviembre, en el Día de Todos los Santos, miles de personas acuden también a los cementerios del país, para homenajear a sus seres queridos fallecidos.
Ya es tradición católica y como cada 1 de noviembre, en el Día de Todos los Santos, miles de personas acuden también a los cementerios del país, para homenajear a sus seres queridos fallecidos.
En Lima, familias, amigos y personas en solitario llegan al cementerio el Ángel, en la cuadra 16 del jirón Ancash, en Barrios Altos, lo propio ocurren en camposantos modernos ubicados en la periferia de Lima.
Como es costumbre los comerciantes de flores y comida ya comienzan a instalar sus puestos en espera de los visitantes.Según se informó, en este camposanto, que fue inaugurado en 1959, ya no hay nichos.
Tal panorama comienza a observarse también en los camposantos de Lima y Callao, como el Presbítero Maestro, Jardines de la Paz, Baquijano, La Regla, El Sauce y otros. La situación es similar en los cementerios de Comas y San Juan de Lurigancho.
En los alrededores de los cementerios se nota la presencia del personal de la Policía Nacional y de miembros del serenazgo para garantizar la seguridad ciudadana. (Imagen: Cortesía Yanina Patricio / http://yanina.wordpress.com/)