Víctor Sarabia, consultor de Agronegocios de la Comisión de Promoción del Perú para la Exportación y el Turismo (Promperú), señaló que el pimiento piquillo tiene oportunidades potenciales de exportación en el mercado de Estados Unidos, país que ya lo compra, aunque en pocas cantidades.
A su vez y complementando la información, Renzo Gómez, presidente del Comité de Capsicum (ají) de la Asociación de Exportadores (ADEX), sostuvo que el producto viene siendo requerido también en Francia y Alemania.
El ejecutivo del gremio exportador refirió que los exportadores nacionales deben enfocarse a destinar el producto a los supermercados del exterior, ya que cada vez son más las personas que lo consumen, sobre todo para acompañar el arroz y la carne.
Afirmó que casi la totalidad de producción nacional de pimiento se exporta, toda vez que a nivel local el consumo es mínimo. “No estamos acostumbrados a consumir este tipo de ají, por eso es que solo algunos establecimientos del país ofrecen el pimiento”, sostuvo Gómez.
Del mismo modo, consideró que el producto además de contar con un certificado fitosanitario de Senasa para ser despachado internacionalmente, no debe contener toxinas y para ello se debe realizar un minucioso control. “Es necesario que se haga un análisis de pesticidas en los laboratorios de control de calidad”, declaró
Este ají, que se cosecha en la costa peruana y que es considerado un producto gourmet en el país, se ha convertido en uno de los acompañamientos preferidos de las comidas que se ofrecen en restaurantes y cadenas hoteleras del mundo, principalmente en Europa. Incluso, el destino número uno a nivel mundial es España.
Finalmente, se supo que el precio internacional del pimiento puede llegar a US$2,700 la tonelada, mientras que las conservas, de alrededor de 300 gramos, se venden en unos 8 euros.
(Con información del Diario Perú 21)
Por Luis Miguel Guerrero.
