Al menos 160 personas murieron y unas 6,700 resultaron heridas tras el terremoto que sacudió el sábado en la mañana el suroeste de China. Como se recuerda el sismo derribó decenas de miles de viviendas, provocó deslizamientos de tierra y afectó carreteras.
La falla de las montañas Longmen, a los pies del límite oriental de la meseta tibetana (centro de China) registró el sismo, cinco años después de que en la misma zona de fricción geológica se produjera el terremoto de Wenchuan, que causó la muerte de 90.000 personas.
Al menos 200 de los heridos están en estado grave por el movimiento telúrico, ocurrido a las 8:02 hora local (0:02 GMT) en la comarca de Lushan del área municipal de Yaan, informó el Centro de Redes Sismológicas de China.
El epicentro del seísmo se situó a 30,3 grados latitud norte, 103 grados longitud este y 13 kilómetros de profundidad, en la misma vertiente montañosa donde el 12 de mayo de 2008 se produjo el seísmo de Wenchuan, de 8 grados, aunque éste tuvo su epicentro 250 kilómetros más al noreste, en el otro extremo de la cordillera.