El especialista informó que existen muchos riesgos cuando una gestante es fumadora activa o pasiva y entre las principales consecuencias se encuentra el riesgo de aborto, que el bebé nazca con menor peso o que presente problemas en el desarrollo del sistema nervioso, lo cual puede provocar que los niños sean irritables durante la etapa escolar.
Asimismo, dijo que existen múltiples estudios que demuestran que el humo de tabaco perjudica en pocos segundos al feto y que las sustancias tóxicas de los cigarrillos provocan además partos prematuros, alteraciones en el desarrollo mental del niño y problemas congénitos.
Según el Dr. Carlos Farías el peor problema es la muerte súbita del recién nacido, que es cuando un niño nace “aparentemente” normal y en los días siguientes fallece sin ninguna explicación. En la mayoría de veces esto se debe a que la madre ha sido una fumadora.
Frente a estas advertencias, en los dispositivos contemplados en el reglamento de la ley antitabaco, el MINSA solicitará que las empresas tabacaleras incluyan en las cajetillas de cigarrillos los mensajes: “El humo de tabaco daña a tu bebé” y “El fumar puede producir abortos”.
Asimismo, el MINSA recomienda a las gestantes peruanas que son fumadoras pasivas alejarse de quienes consuman cigarrillos para evitar futuros daños al bebé.