La Asociación de Exportadores (ADEX) informó que en el primer trimestre del año en curso, las exportaciones de atún en sus diferentes presentaciones consolidaron una facturación de US$ 4 millones 233 mil, cifra que representó un aumento de +18.6% en comparación a similar periodo del 2016, cuando los despachos al exterior sumaron US$ 3 millones 567 mil.
Al respecto, la gerencia de Servicios e Industrias Extractivas de la referida institución, detalló que el atún congelado fue la principal partida direccionada al exterior tras registrar ventas por US$ 2 millones 837 mil. Por su parte, el atún en conserva generó negocios por US$ 1 millón 394 mil y la presentación en fresco concretó un ínfimo monto de US$ 1,134.
ECUADOR LIDERÓ EL RANKING DE IMPORTADORES
Durante los primeros 90 días del presente año, el atún peruano se direccionó principalmente hacia Ecuador, país vecino que realizó demandas por US$ 1 millón 242 mil (progresión de +32%). Muy cerca, lo escoltó España con compras por US$ 1 millón 069 mil. (Superávit de +189%). Cabe resaltar que ambas naciones concentraron en conjunto el 55% de las exportaciones del producto hidrobiológico con valor agregado.
En el ranking aparecen también importadores como Colombia, Italia, Alemania, Chile, Polonia, Portugal, Argelia, Grecia, Canadá, Guadalupe, Estados Unidos y Curacao.
Finalmente, las firmas nacionales que enviaron atún al exterior en el primer trimestre del 2017 fueron Pez de Exportación S.A.C., Seafrost S.A.C., Conservera de las Américas S.A., Pesquera Hayduk S.A., Pesquera Diamante S.A., Coproimpex S.A.C., entre otras.
DEBES SABER QUE…
En términos de volumen, la exportación de atún alcanzó el millón 813 mil kilos, 8.9% más el periodo enero-marzo del año precedente.
El atún es uno de los pescados azules de mayor consumo en el Perú. Es rico en proteínas e importante fuente de nutrientes como el selenio, magnesio y potasio, además de vitamina y grasos esenciales Omega-3.
Su consumo ayuda disminuir los niveles de colesterol y de triglicéridos en la sangre, disminuyendo el riesgo de aterosclerosis y trombosis.
Por Luis Miguel Guerrero Dávila.
