La Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. (EPA por sus siglas en inglés) prohibirá la importación de alimentos con residuos del químico clorpirifos (empleado en los plaguicidas) a partir del 28 de febrero del 2022, por lo cual la gerenta de Agroexportaciones de la Asociación de Exportadores (ADEX), Susana Yturry Farge, solicitó a los integrantes de las cadenas productivas dejar de usarlo a fin de garantizar la inocuidad de la oferta nacional.
El país norteamericano lideró el ranking de los destinos de la canasta agro tradicional y con valor agregado con US$ 2 mil 549 millones entre enero y noviembre del 2021. Algunas de las partidas más solicitadas fueron los arándanos, uvas, espárragos, paltas y wilkings (cítricos).
En el 2020 Perú fue el primer exportador a nivel global de arándanos, quinua y espárragos frescos y el segundo de uvas y espárragos en conserva, por ello, y en aras de mantener ese liderazgo, es esencial seguir capacitando a los productores y a toda la cadena de suministro de insumos del agro.
“Se debe reforzar la trazabilidad, evitar devoluciones y mantener la imagen del Perú como un proveedor confiable de alimentos», expresó Yturry.
Bloque europeo
Desde el 16 febrero del 2020, la Comisión Europea hizo oficial la prohibición del uso del clorpirifos y metil clorpirifos, debido a sus efectos negativos en el consumidor y el medio ambiente.
En opinión del director de la Alianza Cacao Perú, José Yturríos Padilla, hoy en día la tecnología revela las trazas de sustancias dañinas aún en mínimas cantidades, por lo cual lo mejor es dejar de utilizar aquellas que representan un riesgo.
“Estamos en contra del uso de plaguicidas e insecticidas pues podrían contaminar nuestro cacao que se ha posicionado muy bien en el exterior. En reemplazo, promovemos los controladores biológicos (enemigos naturales tales como depredadores, parasitoides, entomopatógenos y antagonistas)”, detalló.
En esa línea, el presidente del Comité de Café y Cacao del gremio empresarial, José Mejía Polanco, instó a instituciones como el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) y la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa), velar por la inocuidad de los alimentos.
“Hay que contribuir con la labor de sensibilización a los integrantes del agro. Por el momento, Senasa se comprometió a crear un grupo de trabajo a fin de tratar este tema”, enfatizó.
Refiriéndose a la cadena cacaotera, mencionó que enfrenta varios problemas como los altos costos de producción, plantaciones no renovadas, ausencia de incentivos a los agricultores, poca inversión en tecnología, y otros que buscan corregir progresivamente, pero si se pierde la confianza de los mercados líderes y los de mejor paga, será difícil recuperarlos.
El dato
De enero a noviembre del año pasado los despachos de cacao y sus derivados ascendieron a US$ 274 millones 381 mil, registrando un aumento del 8%.