Un grupo de intelectuales rechazaron hoy la inclusión del escritor hispano peruano Mario Vargas Llosa como miembro de la Academia Francesa de la Lengua.
La crítica de estas personalidades apunta a la posición política cercanas a la extrema derecha del Nobel de Literatura, según una tribuna publicada en el diario Libération.
Los firmantes son el profesor universitario César Itier, la directora de investigaciones del Instituto de Investigaciones para el Desarrollo (IRD) Evelyne Mesclier, la profesora de la Universidad de París Valérie Robin Azevedo, la investigadora Sylvie Taussig y el antropólogo Pablo del Valle.
Todos expresan su «estupefacción» por la inclusión del Nobel de Literatura de 2010 en el selecto grupo de «los inmortales», que deben velar por el lenguaje francés.
«Esta decisión presenta graves problemas éticos», indican los cinco intelectuales, que recuerdan el reciente apoyo de Vargas Llosa al candidato de extrema derecha a la presidencia de Chile, José Antonio Kast, a quien definen como «nostálgico defensor de la dictadura militar de Pinochet».
También rechazan el apoyo de Vargas Llosa al actual presidente de Colombia, Iván Duque, que «acabó con los acuerdos de paz firmados en 2016» con la guerrilla de las FARC y ha sido cuestionado por la represión a disparos contra manifestantes.
Por apoyo a Keiko Fujimori
En el caso de Perú, los integrantes de la Academia Francesa de la Lengua rechazan el apoyo del escritor peruano a la candidata a la presidencia Keiko Fujimori en las últimas elecciones, quien no sólo no aceptó en su momento los resultados de los comicios, sino que ahora promueve la vacancia del presidente Pedro Castillo.
«Fujimori hace campaña por la destitución del nuevo presidente. Grupos de ultraderecha atacan físicamente a personalidades políticas de centro izquierda y centro derecha. Algunos piden un golpe de Estado. Vargas Llosa ha jugado un papel activo en la llegada de este caos a Perú haciendo una campaña sin reservas en favor de Keiko Fujimori», dice el pronunciamiento.
Otro hecho tiene que ver con la implicación de Mario Vargas Llosa con los llamados «Pandora papers», donde se reveló que tenía sociedades en paraísos fiscales para evadir impuestos. Los firmantes consideran que incluirlo en la Academia «mancilla la imagen de Francia en América Latina, donde sus posturas extremistas son bien conocidas y suscitan un fuerte rechazo».
Su ingreso entre los defensores de la lengua «amenaza con legitimar posturas que pisotean los valores de la democracia a los que Francia quiere asociarse, como la libertad de expresión, la aceptación de resultados de sufragios y el derecho a defender causas sin arriesgarse a perder la vida», agregan.